Estudiantes aterrados después de que una nueva solicitud de ayuda financiera les impide seguir su proceso si sus padres no tienen seguro social

Cuando los padres sin números de Seguro Social intentan completar la solicitud de ayuda en nombre de sus hijos, se les impide continuar. Los funcionarios federales no ofrecen información sobre cuándo se solucionará el problema.
Ashley Estrada, de 18 años, se graduará de la escuela secundaria Diego Rivera en el sur de Los Ángeles en 2024. Actualmente, un error técnico impide que los estudiantes cuyos padres no tienen un número de Seguro Social completen sus formularios FAFSA, y Estrada es uno de los estudiantes afectados. Foto tomada el 9 de febrero de 2024. Photo Credit: Lauren Justice / CalMatters

Mikhail Zinshteyn
CalMatters

Un problema técnico está impidiendo que los estudiantes que son ciudadanos estadounidenses (pero cuyos padres no lo son) completen sus solicitudes de ayuda financiera federal, y el problema está causando pánico en California.

Para muchos de estos solicitantes de universidades, es una crisis que no sólo les impide solicitar subvenciones y préstamos federales, sino también solicitar matrícula gratuita en la Universidad de California y la Universidad Estatal de California o exenciones parciales de matrícula en universidades privadas del estado.

La fecha límite para esa ayuda estatal es el 2 de abril para los nuevos estudiantes, fecha fijada por la ley de California que sólo la Legislatura y el gobernador Gavin Newsom pueden cambiar.

“Me preocupa”, dijo Ashley Estrada, estudiante de último año de secundaria en el Complejo de Aprendizaje Diego Rivera en el sur de Los Ángeles. Estrada es ciudadana estadounidense mientras que sus padres son indocumentados. Tiene un GPA alto y aspira a asistir a UC Berkeley, UCLA, Dartmouth u otro campus de élite.

“No sé a quién llamar”, dijo Estrada, cuyos padres ganan poco dinero. “Porque ya hablé con todos los adultos que me rodean y todos me dicen que esperé y no tienen una respuesta para mí”.

Ha asistido a talleres de ayuda financiera pero no puede completar la Solicitud Gratuita de Ayuda Federal para Estudiantes, mejor conocida como FAFSA. Llamó a la línea de atención al cliente que figura en la solicitud, pero la llamada se desconectó, dijo.

Cuando los padres sin números de Seguro Social intentan completar la solicitud en nombre de sus hijos, reciben un mensaje de error que les impide continuar. Sin la información de los padres, los estudiantes no pueden completar la FAFSA. La directora de ayuda financiera de la Universidad Estatal de California, Noelia González, escribió en un correo electrónico que funcionarios del Departamento de Educación de Estados Unidos dijeron a la universidad que “esperan tener una solución antes del 2 de abril”.

Un portavoz del Departamento de Educación no quiso hacer comentarios sobre el asunto.

El problema es nuevo y surgió este año. La ley federal solo requiere que el estudiante que solicita ayuda federal sea ciudadano o tenga un estatus permanente , pero en la mayoría de los casos esa ayuda se calcula en función de la información de ingresos de los padres o del cónyuge .

La magnitud del fiasco de la solicitud de ayuda financiera

Probablemente decenas de miles de estudiantes de California no pueden completar la FAFSA porque sus padres no son ciudadanos, pero es imposible calcular una cifra firme, dijo Jake Brymner, subdirector de la Comisión de Ayuda Estudiantil de California, la agencia que supervisa la Programa de ayuda financiera de 3,400 millones de dólares. Señaló que el año pasado 108,000 estudiantes en California no incluyeron los números de Seguro Social de sus padres en sus solicitudes FAFSA. Esto podría deberse a que los padres carecían de uno o no quisieron proporcionar sus números.

“Soy de una zona de bajos ingresos y la mayoría de nuestros padres son indocumentados”, dijo Estrada. “Me molesta que estemos pasando por esto”.

El típico estudiante de bajos ingresos atrapado en el embrollo tecnológico federal puede perder hasta $14,000 en exenciones estatales de matrícula conocidas como Cal Grant y $7,400 a través de la beca federal Pell, además de la capacidad de pedir préstamos subsidiados y otras herramientas para pagar la universidad. También está en juego una beca estatal por valor de hasta varios miles de dólares que también tiene como fecha límite el 2 de abril.

“Esta es una gran preocupación para la comunidad de ayuda financiera en todo el país”, dijo José Aguilar, director de ayuda financiera de UC Riverside.

Posible solución a las subvenciones estatales

Si bien los formuladores de políticas estatales no pueden hacer nada respecto a los estudiantes excluidos de la ayuda federal, la comisión de ayuda estudiantil del estado está considerando una solución alternativa para acceder a subvenciones y becas estatales. La idea es permitir que los estudiantes afectados completen la solicitud de ayuda financiera estatal reservada para estudiantes indocumentados y otros no ciudadanos que no son elegibles para recibir apoyo federal. Ese formulario se llama Solicitud del Dream Act de California, y que ya utilizan decenas de miles de estudiantes indocumentados. La comisión no comparte información contenida en la solicitud del Dream Act con el gobierno federal ni con las autoridades de inmigración.

La comisión de ayuda está consultando con las universidades estatales sobre esta propuesta. Pero esa solución “creará mucha confusión para estos estudiantes”, dijo Aguilar. Le preocupa que si los estudiantes cuyos padres no tienen números de Seguro Social completan la solicitud Dream Act, no se darán cuenta de que también tendrán que presentar la FAFSA cuando la administración Biden solucione el problema.

“En muchos casos, estos estudiantes podrían terminar sin recibir la ayuda completa a la que tienen derecho”, afirmó.

Tanto él como el director de ayuda financiera de todo el sistema de Cal State, González, dijeron que el estado debería extender la fecha límite para la Cal Grant. Aguilar agregó que la comisión de ayuda estudiantil también podría identificar a los estudiantes que no cumplieron con la fecha límite de Cal Grant porque sus padres no son ciudadanos y permitirles presentar una apelación.

Gonzales no opinó si es una buena idea abrir la solicitud del Dream Act a ciudadanos cuyos padres no lo son. Pero si eso sucede, le gustaría que la comisión de ayuda estudiantil se comunicara con esos estudiantes para “presentar una FAFSA tan pronto como el proceso esté disponible”.

Preocupaciones por la inscripción

Si bien algunas universidades privadas ricas probablemente puedan ofrecer a los estudiantes paquetes de ayuda financiera para compensar cualquier pérdida de apoyo federal o estatal, la mayoría de los estudiantes dependen del dinero público para costear su educación.

Los estudiantes que comiencen la escuela este otoño tendrán hasta el 30 de junio de 2025 para presentar sus solicitudes FAFSA para el año académico 2024-25. Para entonces, es probable que el gobierno federal encuentre una solución, dijo González de Cal State. Algunos miembros de la comunidad de ayuda financiera de California temen que si estos estudiantes de estatus mixto no procesan su ayuda federal antes de que comiencen las clases, no se inscribirán.

“Eso es preocupante”, dijo Aguilar de UC Riverside. “Nuestro personal estará capacitado para ser sensible a esta población estudiantil, animándolos a completar la FAFSA”.

Si no surge ninguna solución antes de que los estudiantes se inscriban este otoño, el plan de Aguilar es cubrir temporalmente la pérdida de la Beca Pell con la ayuda interna de la UC. La universidad dará a los estudiantes fechas límite para completar la FAFSA una vez que se solucionen los problemas. Si los estudiantes no completan la FAFSA, tendrán que pagar una factura equivalente a la cantidad de dinero Pell que proporcionó UC Riverside.

“Quiero que los estudiantes que están pasando por la misma experiencia que yo sepan que si hablamos, tal vez obtengamos una respuesta”.

ASHLEY ESTRADA, ESTUDIANTE DE ÚLTIMO AÑO DE SECUNDARIA EN EL SUR DE LOS ÁNGELES

Para Aguilar, un problema mayor “es que estos estudiantes perderán los préstamos federales de trabajo y estudio y los préstamos federales para estudiantes subsidiados” para 2024-25 si no pueden completar su FAFSA antes del inicio del semestre de otoño, dijo. Si bien su oficina puede reponer temporalmente una Beca Pell, no puede hacerlo con préstamos, de los que dependen los estudiantes con ingresos de padres ligeramente más altos para pagar la vivienda y otros gastos.

“No creo que exista suficiente información para ayudar a los miles de estudiantes que necesitan ese apoyo en la generación de 2024”, dijo Erica Rosales, quien dirige College Match, un programa que identifica a estudiantes de secundaria de bajos ingresos con altas calificaciones. GPA en el área de Los Ángeles y los prepara para postularse para las mejores universidades del país. Estrada, la estudiante de Los Ángeles, es miembra de College Match.

Marcos Montes es director de políticas de Southern California College Attainment Network, un grupo que agrupa a organizaciones sin fines de lucro, estaba ayudando a una estudiante y a su madre indocumentada a solicitar FAFSA, pero fue en vano. La estudiante se sintió frustrada porque tal vez no calificara para ninguna ayuda financiera.

Montes intentó infundir esperanza. “Sólo tenía que transmitir mi mensaje de que se trata de un problema temporal”, dijo. Su mensaje a esa familia fue “no renuncies a esos miles de dólares de ayuda financiera para los que eres elegible”.

Otros problemas de FAFSA

El problema actual es el resultado de los cambios que el Departamento de Educación de EE.UU. hizo a la FAFSA a finales del año pasado para simplificarla para padres y estudiantes. Pero el formulario revisado, una respuesta a las leyes federales recientes, ha causado estragos a mayor escala por diferentes razones, causando dolores de cabeza a la administración de Biden y a las universidades.

La nueva FAFSA debutó meses después de la fecha de inicio de la solicitud en años anteriores. Las universidades no empezarán a recibir información sobre ayuda financiera de los estudiantes del Departamento de Educación hasta marzo, también meses más tarde de lo normal. Eso creará un enorme cuello de botella para las universidades que tienen que analizar la información financiera de miles de estudiantes admitidos y luego enviarles paquetes de ayuda financiera individualizados a finales de la primavera. El departamento está gastando decenas de millones de dólares para ayudar a las universidades a procesar las solicitudes.

Por lo general, los estudiantes deben comprometerse a inscribirse en una escuela antes del 1 de mayo, pero la demora en enviar la información de ayuda financiera de los estudiantes a las universidades está obligando a muchos campus a retrasar esa fecha límite. Los estudiantes también tendrán prisa por comparar las cartas de concesión de ayuda financiera en un horario comprimido, un tiempo normalmente reservado para llamar a los campus y pedir aclaraciones antes de elegir la escuela a la que asistirán.

La UC y Cal State ahora permitirán a los estudiantes confirmar su inscripción antes del 15 de mayo, y algunas universidades Cal State pueden retrasar aún más la fecha límite. Para entonces, estudiantes como Estrada esperan saber cuáles serán sus paquetes de ayuda financiera.

“Quiero que los estudiantes que están pasando por la misma experiencia que yo sepan que si hablamos, tal vez obtengamos una respuesta”, dijo Estrada. ¿La respuesta que busca? “Vamos a recibir ayuda, ya sabes, vamos a ir a la universidad”.

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