En un esfuerzo por compensar el hecho de que el presidente Donald Trump haya trasladado su toma de posesión al interior de la Rotonda del Capitolio, dejando a muchos poseedores de entradas mirando desde un estadio desbordado, el representante Darren Soto, demócrata por Florida, ofreció a sus electores un gesto único: una visita guiada del Capitolio para los afectados por el cambio de sede.
Justo después de liderar la gira, Soto se sentó en su oficina y reaccionó a las últimas noticias sobre los amplios indultos de Trump para más de 1.500 personas acusadas en relación con el motín del Capitolio del 6 de enero.
“Es extremadamente decepcionante y marca el tono equivocado para su nueva administración entrante”, sostuvo Soto. “Cuando te pones del lado de los criminales en lugar de los agentes de policía el primer día, envías un mensaje equivocado. Estuve en la cámara el 6 de enero. La policía del Capitolio me salvó la vida”.
La gran mayoría de los casos del 6 de enero ya se resolvieron en los tribunales, lo que resultó en declaraciones de culpabilidad o condenas en juicio. Sin embargo, la sección final de la proclamación de Trump ordenó la desestimación de aproximadamente 300 casos pendientes. Entre los indultados se encontraba Robert Palmer, un hombre de Florida que agredió a agentes de policía con un extintor, una tabla de madera y un poste.
La proclamación de Trump conmutó las sentencias de 14 extremistas de derecha, incluidos miembros de Proud Boys y Oath Keepers. Entre ellos se encontraba Kelly Meggs, líder del capítulo de Florida de Oath Keepers, que había sido sentenciado a una década de prisión por conspiración sediciosa. Si bien Soto reconoció la indulgencia para los delincuentes no violentos que han cumplido una condena significativa, enfatizó que otros deben cumplir sus sentencias en su totalidad.
“Aquellos que atacaron violentamente a agentes de policía deberían ser obligados a cumplir toda su condena como esperaría cualquier otro estadounidense que cometiera un crimen tan atroz”, argumentó Soto.
Michael Fanone es un ex oficial de policía de D.C. que fue atacado por personas ahora indultadas por Trump. Le dijo a CNN que se siente profundamente traicionado por la decisión.