Kristen Hwang
CalMatters
Perla López le entrega un montón de papeles a Baudeilio, un inmigrante indocumentado y jornalero de 44 años. Ella acaba de ayudarlo a solicitar Medi-Cal en el centro de beneficios de St. John’s Community Health en el sur de Los Ángeles.
“Si ve algo del condado que no entiende, regrese aquí”, le dice López a Baudeilio en español.
La aplicación tarda menos de 20 minutos. El trámite, aunque breve, marca un hito importante en la expansión de décadas de la atención médica para inmigrantes indocumentados en California.
A partir del 1 de enero, por primera vez, los inmigrantes indocumentados de todas las edades califican para Medi-Cal, el programa de seguro médico del estado para personas de ingresos extremadamente bajos. Convierte a California en el único estado que financia atención médica integral para inmigrantes indocumentados.
Baudeilio, a quien se le ha negado cobertura anteriormente y pidió que no se publique su apellido para protegerlo de las autoridades de inmigración, se une a más de 700,000 inmigrantes indocumentados entre las edades de 26 y 49 años que serán elegibles para Medi-Cal como parte del programa. la expansión final del programa por parte del estado: la realización de un sueño largamente esperado para los californianos sin estatus legal.
“Esta es la culminación de literalmente décadas de trabajo, y es enorme”, dijo Sarah Dar, directora de políticas del Centro de Políticas de Inmigrantes de California. “Es enorme por todo el trabajo, esfuerzo y promoción que se hizo para hacer esto posible, y también es enorme por el impacto que tendrá”.
El gobernador Gavin Newsom y la legislatura estatal liderada por los demócratas han comprometido más de $4 mil millones para la expansión de Medi-Cal anualmente. El presupuesto de Newsom para 2022 hizo posible la última expansión, y aunque el estado ahora se dirige a un déficit de $68 mil millones, los defensores dicen que el impacto positivo que tendrá Medi-Cal en la salud individual no tiene precio.
El cambio resuena profundamente en López, quien también es indocumentada.
Cuando el estado amplió Medi-Cal a inmigrantes mayores de 50 años en 2022, la madre de López finalmente pudo conseguir medicamentos y equipos de análisis de sangre para su diabetes. Este año, rodeada de oropel y otras decoraciones navideñas en la oficina brillantemente iluminada, López está feliz de poder dar buenas noticias a los pacientes indocumentados.
“Esto realmente me conmueve”, dijo López, quien es elegible para trabajar a través del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia. “Es un factor estresante que les quitamos… Para las personas con problemas de salud, Medi-Cal realmente hace una diferencia”.
La clínica donde trabaja López estima que alrededor de 13,000 de sus pacientes son elegibles para Medi-Cal en el nuevo año. Son parte del grupo más grande del ambicioso plan de California para cerrar la brecha de seguros. Solo el condado de Los Ángeles representa aproximadamente la mitad de los afiliados que se espera que califiquen para Medi-Cal.
“Es un momento emocionante tanto para nuestros pacientes como para nosotros”, dijo Annie Uraga, coordinadora de consejeras de beneficios de St. John’s Community Health. “Están listos. Muchos de ellos necesitan o esperan visitas de especialistas”.
La expansión del seguro médico de California
La expansión final se produce nueve años después de que el entonces gobernador. Jerry Brown firmó la ley que hace que los niños indocumentados sean elegibles para el seguro estatal en 2015, y se debe a los esfuerzos de los defensores que se dirigieron al Capitolio para defender su caso.
“Cuando hablamos con personas que se ven afectadas por esto, la diferencia que hace en sus vidas es algo que realmente los números y las palabras ni siquiera pueden describir”, dijo Dar, del Centro de Políticas de Inmigrantes de California. “En muchos casos, la gente ha vivido durante décadas sin ningún tipo de atención sanitaria”.
Medi-Cal de alcance completo, que ofrece acceso a atención primaria y preventiva, especialistas, productos farmacéuticos y otros servicios integrales, cambiará vidas, dijo Dar. California no comparte información de inmigración con las autoridades federales y la inscripción en Medi-Cal no amenazará las posibilidades de obtener la residencia legal, algo conocido como la regla de carga pública.
El Centro de Política de Inmigrantes de California junto con el grupo de defensa del consumidor Health Access California han sido la fuerza líder en la campaña para eliminar los requisitos de ciudadanía para Medi-Cal. El trabajo no fue fácil ni siquiera en la California de tendencia izquierdista. Muchos demócratas moderados votaron en contra de la legislación o se abstuvieron de intervenir en el debate en los primeros días, dijo Dar, pero poco a poco la opinión pública y la voluntad política cambiaron.
Alrededor del 66% de los adultos de California apoyaron la cobertura médica para inmigrantes indocumentados en marzo de 2021, frente al 54% en 2015, según una encuesta del Instituto de Políticas Públicas de California.
El expresidente republicano Donald Trump arremetió contra la expansión de California para los adultos jóvenes en 2020 y afirmó que California y otros estados “llevarían a nuestra nación a la bancarrota al brindar atención médica gratuita financiada por los contribuyentes a millones de extranjeros ilegales”. Los republicanos electos de California, aunque menos duros en su condena de las políticas de inmigración del estado en los últimos años, han acusado a Newsom de sobrecargar el presupuesto estatal y el sistema Medi-Cal.
“Medi-Cal ya está bajo presión al atender a 14.6 millones de californianos, más de un tercio de la población del estado. Agregar 764,000 personas más al sistema ciertamente exacerbará los problemas actuales de acceso a los proveedores”, dijo el grupo republicano del Senado en un análisis presupuestario de enero de 2022.
Newsom, por su parte, ha desempeñado un papel fundamental en el impulso del movimiento, dijo Rachel Linn Gish, directora de comunicaciones de Health Access California. Newsom, quien asumió el cargo en 2019, hizo campaña con la promesa de establecer una atención médica universal en California , y sus defensores han pasado la duración de su mandato como gobernador presionándolo para que cumpla esa promesa.
“No se puede hablar de cobertura para todos si no se habla de cobertura para todos, independientemente de su estatus migratorio”, dijo Linn Gish. “El Gobernador Newsom la convirtió en una de sus principales plataformas desde el primer día y creo que es difícil desvincular esas dos cosas”.
Aún así, Newsom ha enfrentado presiones para hacer más por los inmigrantes indocumentados y hacerlo más rápido. Los defensores y algunos legisladores presionaron a Newsom para que implementara esta última expansión antes, en parte debido al costo desproporcionado que el COVID-19 cobró entre los trabajadores esenciales, muchos de los cuales son indocumentados.
Se prevé que esta ampliación cueste más de 835 millones de dólares en los próximos seis meses y 2,600 millones de dólares cada año a partir de entonces. Las expansiones anteriores, que abrieron la puerta a más de 1.1 millones de inscritos indocumentados, le costaron al estado aproximadamente $1.6 mil millones al año, según informes anteriores de la Oficina de Análisis Legislativo . El precio total de $4 mil millones, aunque significativo, representa una fracción del expansivo presupuesto de Medi-Cal de $37 mil millones.
Aun así, muchos californianos indocumentados seguirán sin ser elegibles para recibir seguro médico. Aproximadamente medio millón de inmigrantes ganan demasiado dinero para calificar para Medi-Cal pero aún no pueden pagar un seguro privado. Los defensores quieren ampliar Covered California para incluir a esa población, pero el creciente déficit del estado hace que eso sea poco probable en el futuro cercano.
Disparidades de salud entre inmigrantes indocumentados
Los inmigrantes indocumentados a menudo evitan la atención médica, lo que dificulta comparar su salud con la de otros californianos. Algunos estudios indican que experimentan tasas más altas de enfermedades crónicas como enfermedades cardíacas, asma y presión arterial alta. Los inmigrantes sin estatus legal en California también tienen más probabilidades de sufrir angustia mental y declaran tener mala salud .
El Dr. Efraín Talamantes, director de operaciones de AltaMed en Los Ángeles, el centro de salud calificado a nivel federal más grande de California, dijo que con frecuencia ve a personas jóvenes e indocumentadas que se sienten saludables pero que “ya están sufriendo el daño final de condiciones crónicas que no han sido detectadas”.
El cambio permitirá a Talamantes y otros que sirven a esas comunidades brindar a los pacientes una atención asequible y de alto nivel. Aunque California ofrece Medi-Cal de emergencia a muchos inmigrantes indocumentados y algunos condados financian sus propios programas , los servicios pueden verse desarticulados con tiempos de espera de meses.
“Cuando estos pacientes ahora reciban Medi-Cal y formen parte de un plan de atención médica administrada con nosotros, entonces seremos responsables de toda su atención, desde la atención primaria y especializada hasta la atención hospitalaria”, dijo Talamantes.
Miriam Pozuelos es una de esas personas. La madre residente del área de Los Ángeles dijo que la expansión le quita una enorme carga financiera a su familia. Ella y su marido pagan de su bolsillo los servicios médicos y, a menudo, se quedan sin ellos. Ambos ya solicitaron Medi-Cal completo para enero.
“Cuando mi familia y yo nos enteramos de esta expansión, realmente esperábamos que realmente se hiciera realidad y que pudiéramos comenzar a recibir la atención que necesitamos y no preocuparnos por ‘tengo que pagar esta enorme factura’”, dijo Pozuelos.
De vuelta en el centro de beneficios de St. John’s Community Health, López ayuda a otro inmigrante indocumentado a renovar su Medi-Cal de emergencia, que se renovará automáticamente el próximo mes. Wilder, de 41 años, quien solicitó que se ocultara su apellido para protegerlo de las autoridades de inmigración, dijo que necesita dos endodoncias por un total de $8,000. Ha buscado durante meses una opción más barata sin éxito, dijo Wilder. También necesita medicamentos para la presión arterial alta, pero no siempre puede permitírselos.
La expansión de Medi-Cal significa que finalmente podrá cuidar de su salud, dijo.
“Es lindo verlos irse felices y sonrientes”, dijo López. “Aunque nos lleve tres horas, se van con una sensación de alivio de poder ver al médico”.
Esta nota fue realizada con el respaldo de la California Health Care Foundation (CHCF), que trabaja para garantizar que las personas tengan acceso a la atención que necesitan, cuando la necesitan y a un precio que puedan pagar. Visite www.chcf.org para obtener más información.
