Los defensores de los niños están criticando una propuesta presupuestaria para recortar fondos para Head Start, el programa que ofrece educación preescolar gratuita para niños de familias de bajos ingresos.
Es parte de la batalla presupuestaria en el Congreso, que debe aprobar un presupuesto o una resolución continua antes del viernes para evitar un cierre del gobierno.
Melanee Cottrill, directora ejecutiva de Head Start California, dijo que los conservadores en la Cámara de Representantes quieren un recorte del 6% en la financiación de Head Start, mientras que los demócratas en el Senado han propuesto un aumento del 2%.
” El recorte del 6% reduciría un número significativo de espacios y servicios”, señaló Cottrill. “En California, Head Start atiende a unos 90.000 niños. Y perderíamos alrededor de 6.000 de esos niños si se implementaran esos recortes”.
Cottrill reconoció que se agradece el aumento del 2% propuesto por los demócratas que controlan el Senado de Estados Unidos, pero que no estaría a la altura del costo de vida o la inflación. Si se aprueba el recorte del 6%, se estima que 51.000 niños en todo el país perderían sus lugares en los programas locales Head Start, lo que dejaría a las familias luchando por conseguir cuidado infantil.
Los conservadores de la Cámara de Representantes, citando preocupaciones sobre la deuda nacional, han propuesto recortes a muchos programas de servicios sociales, incluida la asistencia nutricional para mujeres y niños, maestros en distritos escolares de bajos ingresos, capacitación laboral para jóvenes y programas de asequibilidad universitaria.
Cottrill argumentó que cuando se trata de Head Start, los legisladores deberían analizar el efecto general del programa.
“Head Start es un programa comprobado de reducción de la pobreza”, sostuvo Cottrill. “Ha existido desde la década de 1960. Es increíblemente eficaz. Es una inversión en nuestras familias, en nuestros niños y en nuestro sistema educativo que rinde dividendos en el futuro”.
La investigación de la Asociación Nacional Head Start muestra que estos programas son particularmente beneficiosos para los niños hispanos y negros, los que aprenden en dos idiomas, los niños sin hogar o en hogares de acogida, los que califican para recibir comidas escolares gratuitas y aquellos cuyas madres no se graduaron de la escuela secundaria.
