Una coalición lanzó el miércoles 3 de diciembre la campaña “Choose Children”, una iniciativa para centrar las políticas a favor de la infancia en la campaña de 2028 para gobernador de California. La campaña pide a los candidatos que apoyen programas para ayudar a los futuros padres, reforzar la atención médica de los niños más pequeños, hacer que la educación temprana y el cuidado infantil sean asequibles y remunerar de forma justa a los proveedores de servicios de educación infantil.
Avo Makdessian es director ejecutivo de First Five Association de California.
“California necesita un gobernador que esté a la altura de las circunstancias y aborde la falta crónica de inversión que ha frenado el desarrollo de los niños pequeños durante tanto tiempo,” dice Makdessian. “Necesitamos un gobernador que garantice que los niños reciban los cuidados que necesitan, que apoye a los padres y educadores que velan por la seguridad, la salud y el aprendizaje de los californianos más jóvenes.”
Makdessian señala que uno de cada cinco niños californianos vive en la pobreza. El cuidado infantil cuesta, en promedio, más de $21,000 dólares al año, y el 60% de los bebés en el Estado Dorado no asiste a todas las visitas de control recomendadas para detectar retrasos en el desarrollo y problemas de salud conductual. Esa cifra asciende al 75% en el caso de los bebés afroamericanos. Además, dice que casi uno de cada cinco educadores de primera infancia gana menos de un salario digno.
Mayra Alvarez, presidenta de Children’s Partnership, dice que el próximo gobernador tendrá que ser implacable a la hora de reducir los costos para las familias de California.
“Los padres se enfrentan a un desafío fundamental y urgente que hoy escucharán con claridad: la asequibilidad en la vivienda, atención médica y cuidado infantil. Estos temas no son debates políticos lejanos,” asegura Alvarez. “Determinan cada decisión que un padre toma en casa.”
Los defensores elogian el progreso logrado bajo la administración de Newsom para ampliar la licencia familiar remunerada, promover el jardín infantil de transición e invertir en apoyos de salud mental para la primera infancia.
