Durante las próximas semanas, los niños de todo el país volverán a la escuela. Los especialistas en adicciones dicen que ahora es un buen momento para que los padres aborden cualquier comportamiento preocupante en los hábitos en línea de sus hijos. La adicción a Internet aún no está reconocida formalmente en una herramienta de referencia clave de la Asociación Estadounidense de Psiquiatría.
Pero la Dra. Sara Polley, especialista en psiquiatría infantil y adolescente con sede en Minnesota y directora de psiquiatría de adicciones en Ellie Mental Health, cree que eventualmente se considerará un trastorno. Para los adolescentes, estar demasiado tiempo en las redes sociales puede ser perjudicial para el cerebro que aún se está desarrollando, dijo. Entonces, si han pasado mucho tiempo en línea este verano, los padres deben restablecer hábitos saludables.
“Es realmente útil discutir con su familia un plan de medios que se aplique tanto a los niños de la familia como a los padres de la familia, con tiempos potencialmente específicos reservados para el uso de las redes sociales o el uso de internet no relacionados con la realización de tareas escolares”, explicó.
También recomendó “zonas libres de tecnología” en lugares como la cocina, con la esperanza de generar más conversaciones familiares. Si su adolescente se vuelve combativo cuando se le pide que limite el tiempo frente a la pantalla o se vuelve socialmente retraído y solo prefiere estar en línea, Polley dijo que es hora de buscar consejo de un médico de familia o un profesional de salud mental.
Polley añadió que exceder la marca de “tres horas al día” de uso de las redes sociales puede poner a los adolescentes en mayor riesgo de depresión y ansiedad. También puede impedirles dormir bien por la noche, lo que hace que la transición de regreso a la escuela sea problemática.
“Y cuando les pregunto a los jóvenes: ‘¿Qué hacen cuando están despiertos hasta muy tarde en la noche?’ – Casi el 100% del tiempo, dicen que están en su computadora, usando las redes sociales, viendo videos en YouTube” ella continuó. “Y eso puede hacer que les resulte realmente difícil hacer lo que necesitan hacer durante su trabajo habitual de tiempo completo, que es ir a la escuela”.
A otros expertos les preocupa que los efectos puedan resultar en un comportamiento disruptivo en el aula. Los estudiantes de secundaria y preparatoria a menudo son enviados a casa con tabletas y laptops para uso escolar. Es posible que incluyan configuraciones que limiten lo que se puede hacer en línea, pero Polley dijo que aún es bueno que los padres establezcan sus propios límites. Estas podrían incluir permitir que los dispositivos se utilicen únicamente en la sala de estar o asegurarse de que se guarden en las mochilas cuando se complete la tarea.
