Los niños constituían sólo el 22 % de la población de EE. UU. en 2020, lo cual es un mínimo histórico, según un nuevo análisis de los datos del censo de la Fundación Annie E. Casey.
El informe encuentra, por el contrario, que los niños de la nación constituían el 36% de la población en 1960 y el 40% en 1900.
El demógrafo y coautor del informe, Bill O’Hare, dijo que la sociedad estadounidense está envejeciendo cada vez más rápido y que las personas más jóvenes tienen menos hijos.
“La cantidad de niños disminuyó en más de un millón entre 2010 y 2020”, dijo O’Hare. “Y, de hecho, ha disminuido aún más en los últimos años, desde 2020”.
El informe predice que las implicaciones para el futuro son enormes — aumenta el espectro de una gran escasez en el mercado laboral, lo que significa menos trabajadores para generar fondos para programas que ayudan a los jubilados, como Medicare y el Seguro Social.
O’Hare dijo que otros países que se enfrentan a un envejecimiento demográfico intentan alentar a las familias más grandes ofreciendo atención médica, cuidado infantil y preescolar de alta calidad, gratuitos o de bajo costo.
“Estados Unidos no hace tanto como muchos otros países en términos de apoyo a las familias con niños pequeños”, dijo O’Hare. “El punto es que si nuestro país está interesado en que nazcan más niños, sería bueno pensar en cómo podemos proporcionar la infraestructura de apoyo para esas familias”.
Los datos también muestran que la cantidad de niños blancos no hispanos ha disminuido desde 2010, mientras que las poblaciones de niños de color han aumentado en 46 estados, además de Washington D.C.
Mayra E. Alvarez, presidenta de Children’s Partnership, con sede en Los Ángeles, dijo que los niños de color representan aproximadamente el 75% de los menores de 18 años en el Estado Dorado.
“Estos niños de hoy van a ser nuestros futuros empresarios, líderes”, dijo Álvarez, “nuestros futuros elegidos. Entonces, la inversión en estos niños es una inversión en todos nosotros y en todo nuestro futuro”.
