Kristen Hwang
CalMatters
Más de 75,000 empleados de Kaiser Permanente abandonaron sus puestos de trabajo la mañana del 4 de octubre, iniciando la huelga de trabajadores de la salud más grande en la historia de Estados Unidos, dijeron funcionarios sindicales.
Kaiser y la Coalición de Sindicatos de Kaiser Permanente no pudieron llegar a un acuerdo durante una sesión de negociación maratónica en San Francisco el martes. La coalición representa a ocho sindicatos en cinco estados y el Distrito de Columbia. Más del 90% de sus miembros trabajan en instalaciones de California donde el gigante de la atención médica atiende a más de 9 millones de pacientes.
Entre los que se retiraron se encuentran asistentes de enfermería, amas de casa, técnicos de rayos X, flebotomistas, farmacéuticos, optometristas y otro personal de apoyo. Se espera que la huelga dure hasta el sábado por la mañana. Los médicos y la mayoría de las enfermeras no forman parte de la huelga.
“Los trabajadores de la salud están tomando medidas laborales para protestar por las negociaciones de mala fe de los ejecutivos de Kaiser, que se interponen en el camino para encontrar soluciones para resolver la crisis de escasez de personal de Kaiser”, según un comunicado del Sindicato Internacional de Empleados de Servicios-United Healthcare Workers West, el mayor de los sindicatos de la coalición.
Los contratos de los trabajadores expiraron durante el fin de semana. Otros estados afectados incluyen Colorado, Washington, Oregon, Virginia y Washington, DC.
La ley federal exige que los trabajadores de la salud avisen a los empleadores con 10 días de antelación sobre una huelga. Ejecutivos de Kaiser dijeron que las instalaciones están preparadas para continuar operando durante la huelga.
Continúan las negociaciones contractuales
En un comunicado, Kaiser dijo que llegó a acuerdos con la coalición sindical sobre varias propuestas el martes, pero no especificó sobre qué temas. Ambas partes permanecen en la mesa de negociaciones, según el comunicado.
“Seguimos comprometidos a alcanzar un nuevo acuerdo que continúe brindando a nuestros empleados salarios líderes en el mercado, excelentes beneficios, generosos planes de ingresos de jubilación y valiosas oportunidades de desarrollo profesional”, dice el comunicado.
La coalición sindical comenzó a negociar hace seis meses, abogando por un salario mínimo de $25 por hora para todos los trabajadores y un aumento del 24.5% durante cuatro años para los empleados en todos los mercados laborales de Kaiser. La coalición también dijo que las instalaciones tienen una peligrosa falta de personal y acusó a Kaiser de prácticas laborales injustas por no compartir la información necesaria para la negociación, como la cantidad de personal.
Kaiser sostiene que sus empleados tienen los mejores salarios y beneficios entre los competidores en cada estado en el que opera y que la huelga es injustificada. Ha ofrecido aumentos del 12.5% al 16% durante cuatro años dependiendo del estado y un salario mínimo de 21 dólares, aunque a los trabajadores de California se les ha ofrecido un salario mínimo de 23 dólares.
Algunos servicios con retraso durante la huelga
Aunque los hospitales y departamentos de emergencia de Kaiser permanecerán abiertos, las citas y procedimientos que no sean urgentes pueden retrasarse, dijo Kaiser en un comunicado a los pacientes. Kaiser recomienda a los pacientes comprobar si sus instalaciones locales se ven afectadas por la huelga. Algunas farmacias podrían cerrar temporalmente o reducir el horario durante la huelga.
Kaiser, la aseguradora privada más grande del estado, opera tres docenas de hospitales y más de 500 consultorios médicos en California.
El año pasado, los trabajadores de salud mental de Kaiser en el norte de California hicieron huelga durante 10 semanas por la cantidad de casos y los largos tiempos de espera. La huelga coincidió con una investigación estatal sobre si la aseguradora de salud estaba brindando a los miembros acceso oportuno y adecuado a las citas. Esa investigación está en curso, dijo a CalMatters un portavoz del Departamento de Atención Médica Administrada.
Esta nota fue realizada con el respaldo de la California Health Care Foundation (CHCF), que trabaja para garantizar que las personas tengan acceso a la atención que necesitan, cuando la necesitan y a un precio que puedan pagar. Visite www.chcf.org para obtener más información.
