Conocido como el Nostradamus latinoamericano, su nombre es Benjamín Solari Parravicini, nació el 8 de agosto de 1898 y falleció el 13 de diciembre de 1974. Fue un pintor y artista plástico argentino muy exitoso, quien desde muy temprana edad, comenzó a experimentar dones proféticos. Son muy conocidas mundialmente sus psicografias, que consisten en una serie de dibujos acompañados por un breve texto, las cuales predicen eventos futuros. Dichas psicografias son producto de un trance en el que un espíritu, le comunicaba dichos eventos por medio de voces, sueños premonitorios, comunicación telepática, y diversos episodios de actividad paranormal.
Durante su infancia comenzó a tener comunicación con un ángel, tenía como amigo a un duende y también podía observar a las hadas, su supuesto contacto con el reino angelical, preocupo mucho a sus padres. Un día su padre que era psiquiatra, le realizó una evaluación psicológica, para determinar si su pequeño hijo padecía de algún trastorno mental. Dicha evaluación le demostró a su padre, que él no padecía ninguna patología, los hechos sobrenaturales que experimentaba frecuentemente eran reales.
Parravicini en edad adulta tomó la decisión de convertirse en pintor, y tuvo una carrera muy exitosa, tanto así que el mismo presidente de Argentina, le felicitó en una exposición en el año 1927. Durante esa misma época fue invitado a participar en una exposición artística en Bélgica, en donde obtuvo una medalla de oro por su trabajo, al mismo tiempo llamó la atención de personajes de la nobleza, quienes adquirieron varias de sus pinturas. También se desempeñó como profesor de arte, y se le reconoció como uno de los artistas más sobresalientes, no sólo de Argentina sino también de toda Hispanoamérica.
Cuando niño solía entrar en trance, se comunicaba con espíritus, y posteriormente hacia dibujos de lo que veía o de lo que le mostraban, muchas veces estos dibujos parecían incoherencias inclusive para él mismo. Fue en la década de los anos 30’s, específicamente desde 1936 a 1972, cuando sus dibujos comenzaron a cobrar sentido; él también decía que al crear dichos dibujos un espíritu guiaba su mano, y también le hacía escribir un breve texto en referencia al dibujo que creaba. Fueron más de mil psicografías que fueron creadas por él. Según uno de sus amigos más cercanos, Parravicini le aseguró que había sido secuestrado por dos extraterrestres, cuando se encontraba apreciando el paisaje en el centro de Buenos Aires. Dichos extraterrestres le transportaron a un cuarto luminoso, y uno de ellos le dictó mensajes telepáticos. Y en uno de esos mensajes le dijo, que era él parte de los elegidos, y que volverían a contactarlo en el futuro. Horas más tarde le transportaron al mismo lugar donde le encontraron.
Entre las predicciones más sobresalientes, y que ya se han cumplido están: la inseminación artificial, el cambio de sexo, la revolución cubana, el primer ser viviente que orbitaria el espacio seria un perro, los satélites espaciales, los ataques a las torres gemelas, la guerra fría entre Rusia y Estados Unidos. Y muchos eventos que ya han sucedido, como la pandemia del año 2020.
Llama mucho la atención su psicografia acerca de un ataque a Nueva York, muchos piensan que se refiere al ataque de las torres gemelas ocurrido en el 2001, otros creen que se trata de un ataque a la estatua de la libertad. Uno de sus dibujos más sorprendentes, se refiere a una explosión que ocurriría en las Antillas. Dicha explosión pudiera tratarse de un asteroide o cometa, que se cree pudiera hacer impacto en el triángulo de las Bermudas. Esta predicción es compartida por otros videntes, e incluso se cree que puede ocurrir entre el año 2029 y el 2032. Durante los últimos quinientos años, han existido una serie de profetas y videntes, que han venido anunciando grandes cambios a nuestro planeta, guerras, pandemias, etc. De entre todos ellos son cuatro los más certeros y sobresalientes: Nostradamus, Edgar Cayce, Baba Vanga, y Benjamin Solari Parravicini.
