Las estadísticas muestran que, gracias a la pandemia, los estadounidenses ahora están pegados a sus dispositivos digitales un promedio de 13 horas al día, frente a las 7 u 8 horas al día antes de la COVID.
La exposición a la luz azul de las pantallas está afectando nuestros ojos. La luz azul es parte del espectro UV y puede dañar la retina.
Helen Macias, una óptica de Dynamic Eye Care en North Las Vegas, dijo que están viendo muchos más clientes que se quejan de dolor en los ojos en el último año.
“En este momento, estamos viendo a muchos niños, maestros y otras personas que ahora hacen negocios en línea”, explicó Macías. “La gente ahora está experimentando la tensión en los ojos, mirando la pantalla. Puede llevar a la degeneración macular”.
Las personas con ojos de color claro o antecedentes familiares de degeneración macular corren un mayor riesgo. La luz azul está presente en la luz del sol, pero la mayor parte de la exposición de las personas proviene de sus teléfonos celulares, tabletas, ciertos televisores inteligentes y videojuegos de alta gama.
El Dr. Scott Edmonds, director de atención oftalmológica de United HealthCare, recomendó que las personas sigan la regla 20-20-20: Por cada 20 minutos de tiempo frente a la pantalla, tómese 20 segundos para mirar algo en la distancia a una distancia de al menos 20 pies.
“Ese descanso lo aleja de la luz azul, permite que su pupila vuelva a su tamaño normal, permite que los músculos de su ojo se relajen, permite que su músculo de enfoque se relaje”, enfatizó Edmonds” Todo eso cada 20 minutos realmente le ayudará a que se sienta más cómodo con el tiempo frente a la pantalla”.
La gente puede comprar lentillas para sus lentes o ciertas computadoras portátiles para filtrar la luz azul, y pueden usar la función de “modo nocturno” en sus celulares para reducir la exposición.
