BOISE, Idaho – Incendios forestales están afectando la calidad de aire en el Oeste, trayendo consigo peligros escondidos en el humo, que pueden dañar la salud de las personas.
El National Interagency Fire Center ubicado en Boise ha colocado al país en el estatus más alto en preparación de incendios, nivel cinco.
El Dr. Luke Montrose, toxicólogo ambiental y profesor asistente del Community and Environmental Health en la Universidad Estatal de Boise, dijo que las peligrosas partículas en el humo de incendios forestales conocido como PM 2.5, es lo suficientemente pequeño como para pasar la línea de defensa normal del cuerpo y llegar a los pulmones.
“Éstas partículas son realmente pequeñas”, explicó Montrose. “Y puedes pensarlo como vehículos que transportan químicos hacia nuestros pulmones”.
Montrose advirtió que la exposición repetida y crónica a partículas dañinas reduce la habilidad de las células conocidas como macrófagos de limpiar los pulmones y activar la respuesta del sistema inmune. Idaho tiene actualmente el número más alto de incendios activos en los EE.UU. con 23.
Montrose aconsejó que el lugar más seguro en el que las personas pueden afrontar la mala calidad de aire es en sus casas.
“Es difícil pedirle a las personas permanecer adentro después de que hemos estado encerrados por la pandemia de COVID-19, pero desafortunadamente las personas van a tener que hacer un inventario de sí mismos”, dijo Montrose. “¿Quiénes son, se encuentran en una población susceptible o vulnerable en relación a la exposición al humo de incendios forestales?”
Montrose destacó que la purificación del aire con filtros HEPA puede reducir las parículas dañinas. Pero los filtros son difíciles de conseguir después de la devastadora temporada de incendios forestales del año pasado y sugirió que las personas pueden buscar trucos de bricolaje en línea para crear sus propias unidades purificadoras.
Montrose recomendó a la gente monitorear la calidad de are en su área, e incluso ayudar en ello. Si bien hay limitantes en cuanto a tecnologías de bajo costo para monitorear el aire, añadió que la robusta red capturada en sitios como Purple Air provee información profunda.
“Es fascinante ver cómo estos monitores cambian conforme cambia la calidad de aire o incluso conforme cambia el clima”, Montrose remarcó.
