José López Zamorano
Para La Red Hispana
Existe una larga y digna tradición de profesionistas que ponen su experiencia y tiempo, no sólo al servicio de la sociedad, sino especialmente de los más vulnerables. Un número importante de abogados ofrece regularmente consultas “pro bono”, es decir, gratuitas, a aquellas personas que requieren de asesoría legal y que carecen de los recursos económicos para retener a un profesional de las leyes.
La medicina es otra de las profesiones que por décadas ha contado con miles de doctores que viajan a los países más pobres, en guerra o en medio de conflictos civiles, para extender su mano desinteresada y evitar catástrofes de salud y humanitarias. De especial mención es el trabajo internacional de organizaciones como Médicos Sin Fronteras, fundada en Francia en 1971.
En los Estados Unidos existe la organización sin fines de lucro “Cirugía Sin Fronteras”, un programa médico nacido en California y fundado por el doctor Jorge Henríquez, que provee cirugías a bajo costo a personas de bajos ingresos que no cuentan con la cobertura de un seguro médico, sin importar su estatus migratorio.
El costo de una cirugía de hernia, que puede ascender regularmente a un precio superior a los 20,000 dólares, se reduce a unos 3,500 dólares a 4,000 dólares a través de CSF. Una joven hispana pagó por ejemplo 3,000 dólares para la extirpación de un tumor de matriz que habría costado normalmente unos 30,000 dólares.
Pero incluso el costo reducido puede ser prohibitivo para muchas personas, por ejemplo, los trabajadores del campo en California, por lo que este año fue fundada la Fundación Cirugía sin Fronteras, con el propósito de recaudar los fondos que cubran económicamente la realización de la cirugía a través de la institución.
Karla Terrazas, presidenta de la Fundación comentó en una conversación con La Red Hispana, que a partir del próximo año buscarán incluso ayuda del gobierno. “Las personas que tienen el monto que requiere CSF, pueden operarse inmediatamente a bajo costo, pero las otras personas deben aplicar a nuestra Fundación para solicitar la ayuda económica”, explicó.
Recientemente el estado de California empezó la implementación de las provisiones de Medi-Cal que benefician con medicina preventiva, vacunas y acceso a doctores a todas las personas de bajos ingresos menores a los 19 años de edad. Es un reconocimiento oficial evidente al hecho de que la salud pública no debe estar basada en distinciones migratorias ni diferencias socio-económicas.
Bajo esa misma lógica opera Cirugías Sin Fronteras. “No tienen que ser ciudadanos estadounidenses. Nosotros no somos una agencia de migración. Atendemos a muchos pacientes que no tienen seguro médico porque no tienen papeles”, indicó Karla Terrazas.
Afortunadamente el altruismo es una vocación extendida y creciente a nivel internacional. Y no se requiere ser un abogado o médico para servir constructivamente, en especial a quienes más lo necesitan. Cada uno de nosotros puede aportar su granito de arena para poner nuestra experiencia y habilidades para causas trascendentes y vitales para nuestras familias, comunidades y países.
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