Centros de salud comunitarios de Colorado se están uniendo a un esfuerzo nacional para rechazar los movimientos recientes de big pharma que dificultan el suministro de medicamentos con descuento a las personas que viven en pobreza extrema.
El CEO del Centro de Salud Comunitario Pueblo, Don Moore, dice que un programa federal conocido como 340B ha ayudado a más miembros de la comunidad latina de Pueblo, quienes experimentan tasas mucho más altas de enfermedades crónicas y más barreras para acceder atención medica primaria.
“Estamos cumpliendo totalmente con el propósito de la legislación,” explica Moore. “Que es estirar nuestra financiación pública tanto como sea posible para llegar a las personas más necesitadas, que en nuestro caso incluye a las poblaciones minoritarias.”
En los últimos dos años, los productores de medicamentos y los administradores de beneficios de terceros han estado poniendo obstáculos al programa 340B, según un nuevo informe que pide al Congreso que agregue nuevas protecciones. La industria ha afirmado que los medicamentos con descuento se están desviando a pacientes que no son elegibles según el programa 340B, o que los ahorros no se están utilizando para ampliar el acceso.
Moore señala que la ley tiene un proceso de resolución de disputas para determinar si los centros de salud no están haciendo lo que se supone que deben hacer. Pero las compañías farmacéuticas y los administradores de beneficios están actuando de manera unilateral, agregando restricciones y nuevas reglas que limitan el acceso a medicamentos con descuento en los centros de salud comunitarios y sus farmacias contratadas.
“Han tratado de reducir eso y mantener más dinero en sus bolsillos,” asegura Moore. “En vez de permitir que esos ahorros fluyan hacia proveedores de redes de seguridad como centros de salud comunitarios y asegurarse de que las personas tengan acceso a medicamentos que son importantes para obtener buenos resultados en los pacientes.”
El informe encontró que el 92 por ciento de los 1,400 centros de salud de la nación utilizan ahorros de 340B para aumentar el acceso para pacientes de bajos ingresos y/o rurales. Moore señala una nueva clínica que abrió en enero, la cual ya ha agregado de trescientos a cuatrocientos nuevos pacientes cada mes, y seis clínicas en escuelas, todas posibles en parte gracias a los ahorros de 340B.
“Estas clínicas son un importante punto de acceso para adolescentes y jóvenes adultos,” dice Moore. “Pero no operan sobre una base rentable. Y utilizamos los ahorros del programa 340B para garantizar que esos puntos de acceso puedan permanecer abiertos.”
