Mario Jiménez Castillo
El Observador
Durante un mes hemos observado noticias alarmantes y hemos sido testigos de varios desastres naturales, terremonos y huracanes no dan tregua en el continente americano. Afectando naciones y regiones como México, Puerto Rico, Isla Barbuda, Islas Vírgenes, Cuba, Cayos de la Florida, etc. Además, la política internacional es causa de alarma ante las amenazas del mandatario de Corea del Norte, quien advierte, que convertirá a los Estados Unidos en cenizas. Por su parte el Presidente Trump, reacciona proclamando que Estados Unidos destruirá completamente a Corea del Norte. Vientos de guerra se avecinan.
Desde el día del eclipse del mes anterior, parece que la vida se ha vuelto más difícil para muchos, señales en el cielo causan caos en la tierra. Es presagio que las predicciones bíblicas se están cumpliendo, podemos entonces observar como el libro del “Apocalipsis” está narrando nuestra historia presente y futura. El día 23 y 24 de septiembre ocurrirá una alineación de planetas, Mercurio Venus, Marte, la Estrella Regulus (la estrella más brillante de la constelación de Leo), el Sol, la Luna, Júpiter y Saturno estarán alineados, este fenómeno astronómico bastante peculiar, podría traer consigo más caos y más problemas. Es bastante probable que más hechos sorprendentes impacten nuestro planeta. Hay que andar muy alertas pues en diversas partes del mundo ocurrirán situaciones de violencia, pueden ocurrir nuevos atentados terroristas y más terremontos, erupciones volcánicas, inundaciones y aparición de asteroides cerca de la Tierra.
La madre naturaleza está cansada, golpeada y maltratada por nosotros, los seres humanos, somos implacables con nuestro propio planeta. Existe mucha maldad, avaricia, odio racial, envidia, discriminación, arrogancia y todo tipo de sentimientos negativos, todo esto crea una aura de violencia y caos en el mundo.
Muchas de las profecías, tanto bíblicas, como de otros profetas como Nostradamus, San Malaquías, y Edgar Cayce, coinciden en que estamos viviendo el tiempo de las revelaciones. Los astros indican que vendrá una era de paz. pero antes ocurriran eventos catastróficos que serán la antesala de un gran cambio, una evolución necesaria para la especie humana.
Estas profecías coinciden en el hecho que el mundo no llegará a su fin, pero si llegará el fin del sistema en el que vivimos actualmente.
En la Biblia, en el libro de “San Lucas, capítulo 21, versículo 25”, encontramos esta interesante predicción” Habrá señales en el sol, la luna y las estrellas, y sobre la tierra angustia de naciones, por no conocer la salida a causa del bramido del mar y de su agitación”. Desde épocas remotas los eclipses y las alineaciones planetarias han traído presagios a la tierra, sería muy interesante prestarle la debida atención a estos fenómenos astronómicos, no estamos solos o aislados en el universo, todas las estrellas y planetas existen a nuestro alrededor por motivos que quizá aún desconocemos.
Debemos orar, hacer plegarias y actuar de manera generosa para apaciguar la furia de la madre naturaleza. Dios bendiga a México y a Puerto Rico, países que laten fuerte en nuestros corazones. Es hora de unirnos hispanos, colaboremos, brindemos nuestra ayuda a los miles y miles de damnificados de ambos países. Quienes deseen colaborar pueden hacerlo a través de la Cruz Roja Internacional y otras instituciones sin fines de lucro que ya están haciendo llegar la ayuda a las personas más afectadas. Oremos por la paz del mundo.
¡Que Jesucristo ilumine nuestro camino!
